18 de septiembre de 2023

Emprendimiento en España 2022: intención, motivaciones y obstáculos

El último informe GEM 2022-2023, publicado por el Observatorio del Emprendimiento de España, señala una recuperación de la actividad emprendedora reciente (TEA) con niveles prepandémicos, además de un incremento del emprendimiento potencial.  

Durante el año 2022, el 6% de la población adulta española (de entre 18 y 64 años) se encuentra iniciando un nuevo proyecto de negocio de menos de tres años y medio de vida. Un porcentaje similar al del año 2019, antes de la crisis sanitaria.  

El estudio también augura un crecimiento de la actividad emprendedora, con un 9,4% de personas que tienen intención de emprender en los próximos tres años. No obstante, en comparación con los 48 países analizados, España se posiciona entre aquellos en los que se perciben peores condiciones para emprender.  

En esa línea, la presidenta del Observatorio del Emprendimiento de España, Ana Fernández, resalta que, “pese a que el territorio español está a la cola de sus países de referencia, aquellos que presentan ingresos altos, en la tasa de emprendimiento reciente (TEA), el porcentaje de cierre de empresas en España es el más bajo de su grupo”.  

 

Dinámica emprendedora saludable y con potencial de crecimiento 

 

Durante los años de pandemia, España se posicionó como uno de los países europeos en los que los emprendedores resistieron mejor el periodo de incertidumbre, manteniendo las empresas consolidadas y evitando el cierre de iniciativas emprendedoras. Sin embargo, durante el 2022 se aprecia una disminución del porcentaje de empresas en fase de consolidación.  

Los emprendedores a cargo de empresas consolidadas se reducen hasta el 7%, mientras que el abandono empresarial aumenta hasta un 2,5%. Sin embargo, la tasa de población que cierra definitivamente el negocio es de un 1,5%, lo que significa que algunas personas abandonan una actividad para emprender otra.  

 

El 11% de las personas con estudios universitarios quiere emprender 

 

En el ámbito de población con estudios universitarios, una de cada diez personas afirma que está pensando emprender en los próximos tres años, un 9% lo está haciendo y otro 9% está a cargo de empresas consolidadas de más de tres años y medio de vida.  

Estas tasas de emprendimiento superan a las de menor nivel educativo y consolidan el crecimiento de las vocaciones emprendedoras en la población con mayor preparación educativa.  

 

Incrementa el nivel tecnológico de la actividad emprendedora 

 

En los últimos años también ha ido creciendo el nivel tecnológico de las iniciativas recientes (TEA) y consolidadas. Aunque aún estamos lejos de contar con un tejido emprendedor que destaque por su vocación tecnológica, una de cada diez iniciativas se califica como de nivel tecnológico medio o alto.  

En ambos casos, las iniciativas consolidadas de carácter tecnológico aumentan significativamente en 2022, lo que parece ser el inicio de una tendencia creciente de cara al futuro.  

 

Seis de cada diez proyectos han necesitado menos de 30.000€ 

 

Tal y como recoge el informe realizado por la RED GEN España, los emprendedores han empezado sus proyectos con menos capital que en años anteriores. Seis de cada diez proyectos de negocio han necesitado un capital semilla menor de 30.000 euros, lo que refleja la poca envergadura de las iniciativas, aunque, al mismo tiempo, facilita su financiación.  

Asimismo, más de la mitad del capital de arranque de los proyectos emprendedores procede de sus ahorros personales, mientras que la otra mitad se distribuye entre los préstamos concedidos por bancos e instituciones financieras (17%), ayudas de familiares (10%) y otras fuentes de financiación residual.